Además de la emergencia sanitaria nos acecha (o ya está aquí) una crisis económica grave, pero el confinamiento y la imposibilidad de viajar han dado un respiro a la tierra, desde nuestras ventanas oímos cantar a los pájaros como nunca, las estrellas iluminan el cielo de Madrid, en algunas ciudades del mundo animales de lo más variopinto se pasean por las calles y las plantas están respirando y disfrutando de una primavera explosiva sin humos.
Ojalá que esta experiencia nos sirva y cuando volvamos, aunque sea lentamente a lo que era nuestra normalidad no volvamos a liarla como antes. Atentos a la naturaleza, al agua, a la energía...cuidemos la tierra, como la vida, es realmente nuestra vida.
¡¡Feliz lunes!!!!
¡¡Feliz semana!!!
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